La limpieza integra de nuestro portátil (por lo memos una vez al año y dependiendo de el entorno en donde se utilice el portátil, si hay mucho o poco polvo), va a determinar tanto la vida útil de nuestros portátiles, así como su rendimiento(la temperatura influye directamente en el rendimiento del portátil). A continuación vamos a detallar paso a paso, el procedimiento que realizamos en nuestro taller(las imágenes son tomadas realmente de uno de  los equipos de nuestros clientes, no son imágenes bajadas de Internet), de la limpieza integral de un portátil y la sustitución de la pasta térmica .

Limpieza de portátil 

En principio vamos a omitir los pasos de desmontaje del portátil, para que no se haga muy tedioso ese mini tutorial. Asi que nos ceñimos estrictamente a lo esencial y lo que realmente nos interesa.

Una vez que hemos abierto el portátil, extraemos la placa base de este y lo colocamos en nuestra mesa de trabajo.

Vamos a proceder al desmontaje del disipador de calor del procesador.

Ponemos especial cuidado a la hora de quitar los tornillos que sujetan el disipador a la placa base, para aflojarlos en cruz.

Ya tenemos el disipador liberado, junto con el ventilador

Una vez que hemos retirado el disipador, tenemos a la vista el procesador junto con los chips gráficos, con su correspondiente pasta térmica, la cual vamos a sustituir.

Echamos un vistazo al ventilador y vemos que tiene en las aspas polvo adherido a estas.

Igualmente , en la placa base vemos suciedad la cual limpiaremos con aire a presión.

Procedemos a limpiar el ventilador con aire a presión.

Igualmente retiramos la antigua pasta térmica del procesador y los chips gráficos, con un algodón impregnado en alcohol.

Así mismo, también retiramos, los restos de pasta térmica adherida al disipador.

Una vez limpiados, nos disponemos a poner la nueva pasta térmica en el procesador y los chips gráficos.

Ya hemos echado la nueva pasta térmica.

Procedemos a poner en la placa base el disipador con su respectivo ventilador ya limpios

Atornillamos el disipador en el mismo orden de numeración, o sea, atornillamos en cruz.